Rafa Márquez comenzó como entrenador en las fuerzas básicas del RSD Alcalá de la tercera división de España en el 2020.

Rafael Márquez es uno de los nombres que ha sonado cada vez y más fuerte para tomar el lugar de Xavi Hernández en el banquillo del Barcelona, sin embargo, hacerse cargo de un equipo que se ‘cae a pedazos’ no es una buena oferta para un técnico que recién está empezando su carrera.

Y es que nuestro querido ‘Rafita’ quemaría su primera gran oportunidad con un equipo que exige resultados prácticamente desde el día uno, pero que ni su plantilla actual, ni su directiva pueden respaldar un proyecto a largo plazo con tanta paciencia.

Es verdad, Rafa Márquez conoce el interior del equipo por sus años como jugador, pero la única experiencia que tiene como entrenador es en el Barcelona B, es relativamente nuevo en el mundo de los entrenadores y para tomar el mando de un equipo de ese tamaño se necesita a alguien con las credenciales de, por ejemplo, Pep Guardiola.

Ya que como están las aguas en Barcelona, lo único que haría sería pertenecer una lista de técnicos que no pudo ‘rescatar’ al equipo, sería el malo del cuento.

La actualidad de los ‘Blaugranas’ va más allá de una mala temporada. Por ejemplo, teniendo una escuela como la Masía no es posible que la directiva se incline por seguir fichando jugadores que, aunque están en buen nivel, realmente están más cerca del retiro, como Robert Lewandowski o İlkay Gündoğan.