El mundo del entretenimiento surcoreano se encuentra de luto tras la inesperada muerte de Kim Jong-seok, modelo e influencer de 29 años conocido por su participación en el programa Skip Dating de tvN. Su fallecimiento, ocurrido el pasado 6 de junio, no solo dejó un vacío entre sus seguidores, sino que desató una ola de rumores y especulaciones que su familia ha salido a desmentir con firmeza.

“La información falsa nos está causando un dolor inmenso”, declaró su hermana, quien decidió romper el silencio tras días de especulación en redes sociales.

En foros y publicaciones digitales se asociaba la muerte del modelo con un trágico incidente ocurrido en Hanam, donde un joven se habría quitado la vida tras un conflicto con su pareja. Algunos incluso afirmaban que Kim había actuado bajo los efectos del alcohol y que se enfrentó a la policía antes de lanzarse desde una torre residencial.

Nada más alejado de la verdad.

Una cronología clara de los hechos

A través de un mensaje acompañado por grabaciones de audio, la hermana de Kim reveló lo que realmente ocurrió: esa noche, Jong-seok intentó comunicarse con su novia sin éxito. Al no obtener respuesta, fue a buscarla junto con un amigo. Al llegar, se encontró con un ambiente tranquilo. La discusión que tuvo con su pareja fue breve y sin violencia, y la intervención policial se debió a un malentendido generado por un tercero que intentó evitar una pelea.

“No hubo disturbios, ni agresión, ni intento de huida”, aclaró su hermana.

También reveló que el joven atravesaba una profunda crisis emocional, agravada por una estafa financiera de alguien cercano. Esta situación lo había dejado sin dinero y bajo una fuerte presión psicológica.

“Estaba agotado emocionalmente… su muerte no fue producto de un escándalo, sino de una tristeza que no supo cargar solo”, lamentó la familia.

El daño de los rumores

Ante la difusión de versiones falsas, la familia anunció acciones legales contra quienes continúen publicando información difamatoria. Llamaron a la empatía y al respeto por el dolor ajeno.

“La difamación no es solo irresponsable, es inhumana”, sentenciaron en un comunicado.

Un adiós a una promesa en ascenso

Kim Jong-seok había logrado abrirse paso como modelo y figura pública en Corea del Sur. Su carisma, presencia en pasarelas y trabajo con marcas como DASHU lo convirtieron en una figura prometedora. Su último post en Instagram, publicado solo seis días antes de su fallecimiento, mostraba al joven disfrutando de un evento social, sin señales visibles del dolor que cargaba por dentro.

Su funeral se llevó a cabo el 6 de junio en Hanam, y sus restos descansan en Chuncheon Rest Garden y Yanggu Memorial Park.

Kim Jong-seok no fue una historia escandalosa, fue una vida valiosa que merecía paz.
Su familia pide respeto. Su memoria exige justicia. Su historia debe contarse con verdad.