Menos de 24 horas después de la detención de dos adolescentes que, según las autoridades austriacas, planeaban llevar a cabo un ataque durante un concierto de Taylor Swift en Viena, las autoridades de seguridad delinearon un escenario de atentado terrorista destinado a causar el mayor número posible de víctimas. Barracuda Music, el organizador de los tres conciertos de la cantante en Viena, canceló los eventos el miércoles por la noche. Los conciertos, que iban a comenzar el jueves, estaban previstos para atraer a más de 200.000 fanáticos de todo el mundo.

El principal sospechoso es un joven de 19 años que se radicalizó en internet y prometió lealtad al Estado Islámico. Según informó el jueves en una rueda de prensa Franz Ruf, director de seguridad pública en Austria, el sospechoso confesó poco después de su detención. Proporcionó a la policía una descripción detallada de sus planes, que incluían el uso de explosivos y armas para causar el mayor número posible de víctimas entre los asistentes.

Además Un joven de 17 años, sospechoso de ser cómplice y ya conocido por la policía, había comenzado recientemente a trabajar para un proveedor de servicios de eventos en el estadio Ernst Happel, donde Taylor Swift iba a presentarse. Según informó Ruf, el joven fue arrestado el miércoles en el estadio. Un adolescente de 15 años que también fue detenido para ser interrogado confirmó muchos aspectos de la confesión del principal sospechoso, según indicó Ruf. Añadió que, aunque la policía consideraba que el joven no era un participante activo en el plan, sí estaba al tanto de sus detalles.

Hasta el momento se desconoce la situación jurídica para el grupo de adolescentes. Sin embargo, ya se encuentran detenidos por la policía de Viena.