La conciencia es el acto psíquico por medio del cual el individuo se percibe a sí mismo inserto en el mundo. El término proviene del latín conscientia, que significa “con conocimiento”.
1) Conciencia individual. Es la conciencia que tiene cada individuo. Por medio de esta conciencia, la persona establece qué es lo bueno y lo malo para sí, y puede crear y dirigir su propio plan de vida, poniendo en marcha el instinto de supervivencia.
2) Conciencia social. Es la conciencia sobre el resto de la comunidad. Por medio de esta conciencia, las personas establecen aquello que es bueno o malo para la comunidad como un todo, y se pone en marcha el instinto de protección.
3) Conciencia emocional. Es la conciencia sobre el estado emocional del individuo. Tiene que ver con su estado de ánimo, sus sentimientos y reacciones frente a lo que le pasa. La realización “saludable” de esta conciencia se llama “inteligencia emocional”.
4) Conciencia temporal. Es la conciencia que tiene el individuo sobre el paso del tiempo en él y en el ambiente que lo rodea. Por medio de esta conciencia se distingue lo que es malo o bueno para la comunidad como un todo con respecto a su futuro. Cuando esta distinción se ejerce correctamente se conoce como “inteligencia racional”.
5) Conciencia psicológica. Es la conciencia que tiene el individuo sobre su propia presencia, de los hechos y objetos que se ubican fuera del propio yo y la reflexión de los actos propios.
6) Conciencia moral. Es la conciencia que tiene el individuo sobre las reglas y normas morales y y éticas. Por medio de esta conciencia, la persona se da cuenta de si la propia conducta moral es valiosa o no.